Bernardino Vazquez Mazatzi
Escritor y Periodista
La fotografía que refleja el momento de la política local nos muestra una muy famélica situación en los partidos políticos, en cuanto a cartas fuertes para el próximo proceso electoral. Son muchos, muchísimos los que suspiran y aspiran pero pocos, demasiado pocos, son los que tienen posibilidades.
Y esos muchos que sueñan primero en ser candidatos y luego triunfadores en las urnas se arriman a la sombra prodigiosa del morenismo, y hasta reniegan de su pasado partidista y juran que militaron ahí por la fuerza, por presiones y por hambre pero que siempre han tenido sentimientos izquierdistas y que su destino es luchar contra el opresor que mientras los utilizó, los mantuvo a su lado.
Los políticos aficionados, los comprometidos o los de nacimiento saben perfectamente que hoy como nunca, el Partido Revolucionario Institucional, el Partido de la Revolución Democrática, si es que algo queda de él en Tlaxcala y hasta el Partido Acción Nacional tienen muy pocas posibilidades de alcanzar o garantizar triunfos. Después de sus desastrosos resultados electorales en la contienda pasada no sólo se quedaron sin nada, o con poco, sino que también se dividieron internamente.
Para alcanzar resultados positivos próximos tendrán que aliarse en una mezcla de siglas y colores confusos y en un revoltijo sin sentido que nada bueno traerá a la democracia incipiente e inacabada de Tlaxcala. Los otros partidos pequeños, incapaces de ganar siquiera un volado al heladero, se van a unir con quien les ofrezca migajas de las que siempre se han alimentado y ni siquiera así garantizan votos, triunfos y resultados.
Muchos priistas, perredistas y panistas se arriman al calorcito… se hacen los chistosos y le hacen gracias a MORENA, se dejan ver, se venden como producto benéfico, milagroso; se juntan con los morenistas definidos y se dicen amigos de quienes hasta hace poco y aún hoy en privado, denostaban y critican. Quieren y esperan un milagro; quien quita en una de tantas, por desgracia y por una distracción de Dios, son ungidos candidatos. Todo puede pasar, creen.
El caso es que, dicen los que saben y parece que sí saben y por eso lo dicen, MORENA va a volver a arrasar en el proceso electoral del 2021, que la animadversión del pueblo de Tlaxcala hacia el PRI, PAN y PRD se mantiene intacto. Por ello es que se encaminan y se juntan con quienes creen que van a ser los candidatos y probables triunfadores. Desde este momento están haciendo su luchita…
En Chiautempan, por poner un ejemplo, se mueven los personajes en reuniones chiquitas, en silencio, se dejan ver, se proponen como posibilidad. Guillermo Berruecos, de la CAPACH dice que MORENA y PT lo ven con buenos ojos, pero no tiene presencia en la zona de la montaña; Fabiola Rosas Cuahutle, siente que el PRI la va a cobijar, está haciendo talacha y es buena carta del tricolor pero con muy pocas posibilidades de ganar algo; Mario Olivares, dicen, está dejándose ver desde la presidencia y que busca el calor del PRI. Juan Eloy Berruecos piensa lo mismo aunque pocos lo conocen.
Las vacas en el PRD están tan flacas que ya hasta las arrastra el viento. Ahí cualquiera quiere ser candidato de algo sin posibilidades, no obstante, Alejandro Netzahualcóyotl levanta la mano. Pero también está Belén Vega, ex síndico y también con muy pocas posibilidades de algo. Por ahí alguien me hablo de un tal Omar Ramírez Zárate a quien sin duda nadie conoce y que no tiene partido que lo postule pero sí tiene muchas ganas de todo.
Juan Carlos Jiménez, hijo de don Gustavo dice que quiere y que puede, y que le apuesta todo a MORENA y asegura que lo merece… como muchos. Hasta Carlos Ahutazi junior coquetea con el PRI y con MORENA. Soñar no cuesta nada. Otro que desde el PRI quiere para Chiautempan es Eduardo Silvestre, empresario de la radiodifusión. Es joven y con muy buenas ideas pero a pesar de sus capacidades y propuestas viables, no lo van a dejar pasar.
Y en ese abanico de aspirantes y suspirantes hay otros muchos que pueden o que deben ser tomados en cuenta. Son morenistas que han hecho la chamba, que se han ganado el derecho, que han sudado la camiseta y han hecho sacrificios. En MORENA hay mucho de donde escoger y hay hombres y mujeres que si no son apoyados terminarán en políticos frustrados.
En Chiautempan hay morenistas valiosos, con enormes posibilidades de ganar en las urnas y de ser excelentes gobernantes. Ahí está Adalberto Sánchez Solís, también joven y con mucha experiencia y trayectoria, con equipo y voluntad. Este personaje es garantía de triunfo sobre cualquier alianza o candidato. Incluso dentro de MORENA hay voces ahora en el casi anonimato que lo proponen para la presidencia de Chiautempan o para una diputación; dejarlo fuera, dicen, sería un grave error y un desperdicio de prospecto.
En las próximas elecciones de Tlaxcala, los partidos deben mirar hacia la juventud que es hoy por hoy, la única opción para sacar adelante al país, al estado y a Chiautempan.