SOCIOLOGANTE

No soy feminista, pero...

Agradezco a las mujeres que no conocí pero que lucharon porque yo pudiera votar y por las que tuve mejores oportunidades laborales en mi vida.

Me duele ver mujeres golpeadas, desaparecidas, humilladas, mientras que el “machismo” es todavía solapado por el gastado argumento “ella tuvo la culpa”.

Me rio con incredulidad cuando son ellas quienes cantan a ritmo de reggaetón estrofas denigrantes con una clara connotación sexual…si…leyó bien, las tararean y encumbran a los sujetos que las interpretan.

Admiro a las féminas que trabajan, son amas de casa, estudiantes, todo en una, y porque nosotras pedimos eso: igualdad y hay felicidad en ello, porque es una realización.

Reconozco que he criticado cuando, se supone que se debe tender la mano, defender y crear sororidad entre nosotras, pero bajo la excusa de que la “plática” está interesante barremos a nuestra vecina o compañera de trabajo.

No me creo la frase “entre mujeres podremos despedazarnos, pero jamás nos haremos daño”, claro que podemos herirnos, demasiado, desgraciadamente, la peor enemiga de una mujer puede llegar a ser otra.

Muchos hombres no son machistas, apoyan a sus parejas y no se les reconoce, y si son demasiado nobles, se les trata de “nenas”, “agachones”, “mandilones”, y lo más gracioso es que es la misma mujer quien lo dice.

En la marcha de la CDMX, alguien entrevistó a un señor que apoya el movimiento feminista, pues su esposa e hija fueron víctimas de la delincuencia y violencia de esa metrópoli, pero ellas pasaron de largo, con la furia desbordada, con la pasión desatada y la recriminación hacia las autoridades bajo el argumento: “vivas se fueron, vivas las quieren de regreso”.

No soy feminista, pero las respeto, cada quien, desde su trinchera lucha por mejores condiciones de vida, por un equilibrio entre mujer y hombre. Respeto el querer hacerse escuchar de diferentes formas y, sobre todo, respeto el dolor de haber perdido a una familiar.

En México y el extranjero predomina el machismo, ¿por qué? Tal vez porque desde el inicio de los tiempos, se dieron cuenta de que ellos eran más fuertes físicamente que nosotras y eso les dio poder sobre nosotros al inicio, sin embargo, los tiempos cambiaron, la fuerza física permanece, pero el mundo evolucionó…más vale maña que fuerza, sobre todo, pesa más la inteligencia.

Relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button
WP Twitter Auto Publish Powered By : XYZScripts.com