Daniel Casas
A la fecha, más de 90 mil de las 120 mil hectáreas destinadas para el cultivo de maíz han sido sembradas en este ciclo primavera-verano 2022-2023 en Tlaxcala, reportó la Secretaría de Impulso Agropecuario. Y es que las lluvias de los últimos días han permitido que los campesinos procedieran a la siembra.
El titular de la SIA, Rafael de la Peña Bernal, informó que al inicio del ciclo fue complicado debido a la falta de lluvia y las heladas atípicas, principalmente en la zona oriente del estado, lo que provocó que esta etapa se retrasara.
“Se estaban haciendo como cebollines las milpas pero volvieron a resurgir, van a tardar en llegar a la floración cuando espigue, una vez que tengan la espiga creo que nos van a dar tres toneladas por hectárea, estamos calculando que seguía con este sequía no íbamos a tener dos toneladas por hectárea pero es pobre, sobre todo porque es maíz criollo, sobre todo Zitlaltepec que es a donde tenemos la crema y nata de nuestros maíces”.
Dijo que los daños por sequía no rebasan el cinco por ciento de las 90 mil hectáreas que se han sembrado de maíz, trigo y cebada, y cuyo análisis ya se realiza para que a través de la aseguradora se pague a los agricultores que resultaron afectados por las condiciones climatológicas.
Reveló que algunos campesinos le han apostado a la siembra de amaranto y trigo, debido a la demanda que tendrán estos cereales en los próximos meses, pues el conflicto entre Rusia y Ucrania generará que se abra mercado, aunado a que son granos que resisten más los cambios de clima.
“El amaranto va a tener un crecimiento total y el trigo, con la problemática que tenemos entre Rusia y Ucrania, Ucrania es uno de los mayores productores a nivel mundial, sus campos están siendo bombardeados, algunos van a tener muy poco y van importar el 30 por ciento, nosotros comemos tortilla, pero los que están en Europa comen pasta, pizza y van a empezar a buscar mercados que les provean y estoy seguro que aquello que le apuesten al trigo van a poder vender hasta 12 o 13 mil pesos la tonelada hace un año fue de 6 mil pesos a la harinera”.
Finalmente, confió en que las condiciones del clima no afecten la producción, ya que en los últimos ciclos se han presentado lluvias tardías y heladas tempranas, pero hay esperanza que el tiempo sea benévolo para los campesinos.