Por no acudir a marcha vs Chiautempan, descontarán a burócratas

Trabajadores sindicalizados adheridos “7 de Mayo” serán castigados en su bolsillo por no apoyar la defensa de empleados despedidos; ya fueron notificados por su dirigente

Gerardo Santillán

Por no acudir a la megamarcha del pasado 16 de febrero contra el Ayuntamiento de Chiautempan, trabajadores adheridos al sindicato de burócratas “7 de mayo” serán sancionados con un descuento de 15 días en sus nóminas, reportaron molestos empleados del base al servicio el Ejecutivo.

Bajo la gracia del anonimato, dieron a conocer que el secretario general del gremio, Edgar Tlapale Ramírez, ha visitado durante la presente semana por sectores a los sindicalizados de las diferentes dependencias que componen el Poder Ejecutivo para notificarles personalmente de la determinación.

En total les serán descontados a los “incumplidos” 15 días de sueldo en cinco quincenas para que no resientan el efecto. De hecho, el sindicato ya pidió a la Oficialía Mayor de Gobierno realizar la retención correspondiente y reportarla a las arcas gremiales.

Sin embargo, los inconformes con  lo que consideraron una acción unilateral por parte del dirigente sindical, aseguraron que la medida es ilegal porque no se pueden descontar más de tres días de salario a los trabajadores de base, por lo que no descartaron que haya acciones jurídicas para defender su derecho.

A decir de los trabajadores visitados por Edgar Tlapale, el sindicato estima obtener más de 500 mil pesos por los descuentos, dinero que se desconoce en qué será aplicado o si será utilizado para patrocinar otras marchas que se tienen previstas, en virtud de que otros ayuntamientos ya notificaron del desconocimiento de sindicalizados heredados por las administraciones pasadas.

Los basificados disconformes manifestaron su molestia contra el líder sindical porque se supone que s7 función es defender los derechos de los trabajadores y en este caso lo está atropellando.

Es importante recordar que en la marcha contra el Ayuntamiento chiautempense participaron unas tres mil personas entre burócratas y sus familiares, pero también de ciudadanos ajenos a los que se les pagó 50 pesos a cada una y así los basificados poder justificar su intervención, toda vez que les pasaron lista.