NO ME LEVANTES LA VOZ

Quién no recuerda estas palabras siendo pequeño, replicarle algo a mi madre significaba una falta de respeto, en esos entonces, el concepto represivo hacia la mujer (hablo de unas décadas atrás) en muchos casos parecieron evidentes, pero cuántas de aquellas parejas que yo recuerde se separaron, al menos en mi barrio la gran mayoría se mantuvieron unidas salvo algunas que si me lo preguntaran ahora no sabría quiénes.

¿Por qué menciono esto? La gran mayoría de mi generación son hombres y mujeres de provecho o al menos hablo en lo particular.

Cuántas limitaciones tenía el hacer de la mujer, pero cuántas tenía el hacer del hombre; creo que en ese entonces se conformaban buenas familias porque estaban basadas en la confianza, el respeto y la dignidad de ambos; siempre con la idea de sacar adelante a los hijos, el cual se convertía en un trabajo compartido.

Cuántas veces no escuche decir que la mujer era el pilar de la casa y si ella no estaba, se convertía en un desastre que hacía que los hijos desviaran su rumbo.

“No me levantes la voz”, si lo escucháramos ahora pareciera ser represivo, pero para mí y espero que para muchos, era evidencia de la autoridad de nuestra madre en casa y que si no nos ordenábamos nuestro padre era el que más temor nos generaba.

Desviarnos de los valores en la familia en ese entonces, era muy complicado; ¿Qué ha pasado de esos tiempos a los de ahora? Trato de ser lo más objetivo y entender que nuestra sociedad cambió de manera poco comprensible.

La llegada de la tecnología, así como los cambios de la normatividad social: “derechos de los niños, derechos de la mujer, derechos humanos, derechos de los LGBT, paridad de género… Crearon una explosión en las nuevas generaciones que no han alcanzado a retomar el orden social que les llegó como un detonante sociológico que esperemos pronto tome el orden que le corresponde.

Vaya pues una reflexión:

¡Cuánta indignidad debe causar la insensibilidad de no ser sensible ante el sentir de la mujer!

Ingeniero Antonio Lima Flores