Lo que mal empieza, mal acaba

Desafortunadamente para los chiautempenses, esa frase se puede aplicar a la agonizante administración de Antonio Mendoza Romero, la cual pasará a la historia con mucha mena y nada de gloria. Apenas en los primeros 100 días de su gobierno pudo presumir algo, después nunca pudo levantar el vuelo.

Las altas expectativas depositadas en el perredista – petista – priista nunca fueron cumplidas. Chiautempan nunca cambió. Viejos problemas persistieron y otros nuevos se presentaron. Incluso en materia financiera, no se recuerda un daño patrimonial tan alto a las arcas municipales, tan alto como más de 100 millones de pesos, según lo comprobaron los diputados.

De hecho, el maiceado Cabildo sarapero aprobó en una furtiva sesión de Cabildo, heredar los pasivos a la próxima administración y que sea a través de los excedentes petroleros que esos sean cubiertos. Así, sin más.

Desde aquel fatídico 5 de julio de 2014, en un vergonzoso episodio de barbarie chiautempense que llevó al destrozo de parquímetros, luego de que un policía atropelló a una mujer – a la que por cierto no se le cubrieron todas sus demandas –, la administración municipal cayó en un bache del que no solo ya no pudo salir, sino que se hizo más profundo cada vez por sospechosos malos manejos financieros.

A eso le siguió un descarado uso de recursos materiales, humanos y económicos a dos campañas electorales: la de Angélica Carreto, fallida por la diputación federal en 2015, así como la de Yazmín del Razo, triunfante por la diputación local en este año. Ambas por el PT y esta última seguramente será una moneda de cambio en el Congreso.

Y tras la reprobación de las cuentas públicas 2015 y parcial 2016, como broche de oro los policías ya no aguantaron más los abusos de tres años, por lo que decidieron manifestarse por la falta de pago, en otro episodio que no abona a la imagen del municipio y de una institución que deber ser respetable y cercana a la sociedad.

Eso solo son botones de muestra de un trienio en el que seguramente – con lupa – no todo fue malo, algunos resquicios positivos se podrían encontrar, pero eso la ciudadanía nunca lo reconocerá porque Chiautempan en lugar de haber avanzado algunos pasos, dio otros tantos hacia atrás y en eso Mendoza Romero fue el  principal obstinado.

Hasta la próxima.

Relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button
WP Twitter Auto Publish Powered By : XYZScripts.com