Rodríguez-Maldonado, J. J. R; Arana-Hernández, Ma. S. y Calderón-Rodríguez, P.M.
Introducción.
Frente a las duras evidencias que los medios masivos de desinformación muestran y plantan como la más grande tragedia ambiental que vive la humanidad- (claro eufemismo)- pues intentan relacionar, estas supuestas tragedias a un cambio climático acelerado por el animal racional (Bbc. news, 2020).
Evidencias como los mega incendios en Australia, en E.U.A.; no solo por la intrínseca tragedia del mundo animal, sino también del racional (decesos que se pudieron evitar), así como las pérdidas económicas y los deterioros y destrucción ambiental. Sismos y maremotos (Cuba-Jamaica) con alerta de tsunami y la aparición sorpresiva del coronavirus, potencial amenaza pandémica. Son certeros atisbos del criminal eufemismo a escala nacional y estatal de estar preparados frente a esta amenaza viral, con un sistema de salud en extinción.
Se suman los asesinatos de mexicanos vinculados a la defensa de su territorio frente a empresas transnacionales expoliadoras de los recursos naturales del país, con la frecuente y rara e inexplicable, complicidad de las administraciones federales, estatales, municipales y locales. Como el caso del activista Homero Gómez González del oriente de Michoacán. El defensor del río Metlapanapa Miguel López en Santa María, Zacatepec, Puebla. Y 500 integrantes, los cuales exigen cancelar las obras de una cervecera en Mexicali, Baja California por afectar potencialmente el suministro de agua potable de los habitantes
Es irrefutable cuestionarnos, en una mínima acción de autogobierno y autocontrol, en la realidad mexicana y en la realidad tlaxcalteca: ¿Cuántos años más piensas vivir, a partir de esta fecha? Y ¿En qué condiciones, sano o enfermo?
El estimado y querido lector no debe olvidar la relación medio ambiente-enfermedad, es decir; a más deterioro y contaminación ambiental, más enfermedades potenciales y reales padece el habitante tlaxcalteca y puede desembocar en su fallecimiento, frente a la extinción de un sistema de salud, sumado a la criminal voracidad de la salud privada.
El medio ambiente.
La batalla a favor del medio ambiente se ha dado desde la administración federal de Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón, y comienza a declinar en la administración de Peña Nieto, aproximadamente 24 años de esfuerzos para casi desaparecer en la administración actual (AMLO).
24 años de profesionales, políticas públicas, instituciones y recursos económicos de los mexicanos. Cuantitativamente ¿cuáles son los resultados de estas inversiones a la fecha?
Una visión miope y simplista afirmaría que es un rotundo fracaso, estos 24 años, otra visión optimista afirmaría, que este tema es un tema de acciones de largo aliento.
¿Cuál disciplina? Puede ayudarnos a entender este escenario nacional, estatal y local en esta línea temporal de 24 años.
Existe una potencial explicación desde el tema de las emociones (Goleman, D.2016) y su evolución en el animal racional, que puede coadyuvar a explicar los aciertos y no aciertos de las acciones emprendidas a favor del medio ambiente nacional, estatal y municipal.
El boom por el medio ambiente, a la fecha esta extinto (Aristegui, 2020).
Las emociones y la evolución.
Las emociones le son útiles al animal racional para su sobrevivencia, desde su aparición (2.8 millones de años) hasta la fecha (SINC, 2020). De ahí que una emoción está relacionada, directamente con una acción y viceversa. Por ello para el cerebro del animal racional pesa lo mismo un sentimiento y un pensamiento.
Aunado a la construcción del cerebro y su consecuente conducta, el cerebro grabó en la mente un conjunto de conductas automáticas, como el deglutir y el respirar, el atacar y el huir.
En un contexto evolutivo, es en el grupo de mamíferos, al cual pertenece el animal racional en donde la(s) pasión(es) explota(n) y gana, queda claro que poseemos un cerebro emocional poderoso y un cerebro racional.
La construcción evolutiva del cerebro, puede explicar de manera robusta, el predominio de la mente emocional, sobre la mente pensante.
El tronco cerebral se construye de abajo hacia arriba y contiene las funciones vitales, creándose en un primer momento el centro emocional, en un segundo momento la neo corteza, el cual es el cerebro pensante y el centro del olfato, el sistema límbico, el amor-terror, el aprendizaje-memoria, los sentimientos-pensamientos-ideas.
Nos permite tener sentimientos sobre nuestros sentimientos y le otorga un gran poder para influir sobre el resto del cerebro, incluidos, por supuesto, los centros del pensamiento (Goleman, D.2016).
Los sentimientos y el medio ambiente o miedo ambiente.
Si el cerebro del animal está formado a partir de un tronco cerebral poderoso y en él están asentadas las emociones, cualquier evento en el medio ambiente que vivimos y destruimos, que no genera un sentimiento, carece, en automático de alguna reacción, sea positiva o no positiva.
Comprar una botella de lactobacilos, beberla, tirarla al piso, pisarla para después correr y subir a la combi, en una calle de Apizaco, plantea, a partir de la estructura del tallo cerebral, una total desconexión emocional de este acto y sobre todo, de sus consecuencias personales y para el resto de los habitantes coexistiendo en el mismo ambiente.
Efecto semejante, cuando el ama de casa, “barre” la banqueta con su manguera de agua, sin importar las consecuencias, es decir; sin sentir ni pensar nada al respecto, en lo personal y en lo colectivo, respecto al uso y abuso del recurso hídrico, frente a otros conciudadanos que no tienen acceso al agua.
Como ahora sabemos que para que se organice una acción es necesaria una emoción, aquí hay una relación central, con respecto a las acciones a favor del medio ambiente.
En un primer momento el cerebro del animal, debe contar con archivos, experiencias previas, para sentir la acción: el desperdicio de agua y llevar a cabo una acción positiva o no. La falta de experiencias y emociones, se suman al deterioro ambiental, a través de la inacción del habitante y ciudadano tlaxcalteca
La desconexión emocional de acciones negativas que afectan al medio ambiente, explica una parte de la inacción del animal racional.
El falso espejismo de: “a mí no me pasa nada”, ampliamente arraigado en la mente e inacciones mexicanas y aplicado a muchas esferas, se aplica cotidianamente también al medio ambiente.
Una acción toral para retomar las acciones a favor del medio ambiente, es generar, a través de visitas, a ecosistemas como el tiradero de basura, la planta de tratamiento de aguas residuales, el desagüe abierto: río Zahuapan, áreas incendiadas, barrancas: tiraderos de basura, a estudiantes de todos los niveles escolares, y empleados públicos, para generarles archivos de emociones, de sus acciones deteriorantes y las consecuencias de ellas.
Incluido el gobernador constitucional del estado de Tlaxcala, diputados locales, empleados de la administración federal, estatal y municipal actual (El Sol de Tlaxcala, 2020).
Empecemos por la población pensante, los estudiantes en las escuelas, públicas y privadas, de todos los niveles existentes en el estado y con la población de adultos mayores.
Bibliografía.
Aristegui. (2020). AMLO y agenda 2030 de la ONU. https://aristeguinoticias.com/2509/mexico/asegura-amlo-que-su-gobierno-esta-protegiendo-el-medio-ambiente/ BBC. News. Mundo. (2020). https://www.bbc.com/mundo/noticias-51007922. 06 feb, 2020.
El Sol de Tlaxcala. (2020). Fortalece Marco Mena cooperación ecológica con Secretario Federal de Medio Ambiente. https://www.elsoldetlaxcala.com.mx/local/fortalece-marco-mena-cooperacion-ecologica-con-secretario-federal-de-medio-ambiente-4705112.html. 06 feb, 2020.
Goleman, D. (2016). La inteligencia emocional. Ed. B. México. 397pp. SINC. La ciencia es noticia. https://www.agenciasinc.es/Noticias/El-l-primer-Homo-existio-medio-millon-de-anos-antes-de-lo-que-se-pensaba. 06 feb, 2020.