La Secretaría de Cultura y el INAH aseguran la repatriación de alrededor de 750 piezas patrimoniales

Se ha gestionado la entrega de bienes arqueológicos e históricos desde Alemania, Italia, Países Bajos, Dinamarca, Australia, Francia y Estados Unidos

Redacción

Derivado del trabajo conjunto entre la Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), este 2021, “Año de la Independencia y la Grandeza de México”, el Gobierno de México concretará la repatriación a México de alrededor de 750 piezas patrimoniales.

Al respecto, la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, recordó que, en lo que va de la presente administración, el Gobierno de México ha conseguido la repatriación permanente de 5,509 piezas patrimoniales, de las cuales 4,915 son arqueológicas y 594 son de carácter histórico. Sobre este nuevo conjunto de alrededor de 750, detalló que se tratan de piezas, tanto arqueológicas como históricas, resultado de gestiones realizadas a lo largo de 2020 y lo que va de este 2021.

“Esta importante reintegración al patrimonio nacional se enmarca en las conmemoraciones emblemáticas programadas para este 2021, pero además es fruto de una política decidida, impulsada por el Gobierno de México, que busca incidir en el respeto y reconocimiento a la historia e identidad de los pueblos; cuya impronta está en estos objetos que formaron parte del tiempo y la cotidianidad de alguna de nuestras culturas originarias”, apuntó la encargada de la política cultural del país.

Por su parte, el director general del INAH, Diego Prieto Hernández, precisó que este logro acredita el trabajo permanente que las instituciones mexicanas llevan a cabo en torno a la investigación, conservación, difusión y protección legal del patrimonio arqueológico, histórico y paleontológico de México; y, desde luego, a la recuperación de aquel que ha salido de nuestro país de manera ilícita.

Explicó que el conjunto de piezas, muchas de las cuales serán repatriadas en fechas próximas, “deriva tanto de decomisos logrados por las autoridades judiciales de otras naciones, como de devoluciones voluntarias en el extranjero, como han sido los casos de Alemania, Italia, Países Bajos, Dinamarca, Australia, Francia y Estados Unidos”.

No obstante, el conjunto de piezas ya ha sido dictaminado por los expertos del INAH, e incluye desde elementos olmecas y del Altiplano Central mesoamericano, los cuales se remontan al periodo Preclásico (2500 a.C.-200d.C.), hasta el Posclásico (900-1521 d.C.) e, incluso, de la época novohispana.

De esta última temporalidad se inscribe una pila bautismal y un aspersor de agua bendita, objetos del siglo XVIII, cuyo reintegro a México se ha pactado a través de la colaboración entre el INAH y la Sociedad Histórica de Arizona, Estados Unidos.

En el caso de los objetos prehispánicos destaca una urna maya elaborada entre los años 900 y 1600 de nuestra era, la cual, según se dio a conocer recientemente, procede de la localidad arqueológica Laguna Pethá, en Chiapas. Su devolución se concertó en diálogo con el Albion College, de Michigan.

También, desde Estados Unidos se acordó la devolución a México de la Estela 3 del sitio maya La Mar. Asociada al estado de Chiapas, la estela fue elaborada en roca y data del periodo Clásico Tardío maya (800-900 d.C.); contiene la representación de un guerrero con atavíos de alto estatus que porta un tocado y sostiene con la mano derecha a un noble cautivo, el cual ha sido despojado de su vestimenta e insignias.

El nombre del protagonista de la estela se lee como ‘Mo ‘Chahk’, gobernante de La Mar –sitio cuyo nombre original es Piedra de Conejo, de acuerdo con inscripciones en sitios contemporáneos a este–, a quien se alude en monumentos de zonas arqueológicas como Palenque, Toniná y Piedras Negras.

Cabe señalar que la Estela 1 de La Mar se halla en el Museo Regional de Chiapas; dos fragmentos de la Estela 2 están en el Museo de Palenque, y otro más, restituido a nuestro país en 2019, se resguarda en el Museo Nacional de Antropología.

Por otra parte, procedente de Francia también se encuentra una pipa de barro con la figura zoomorfa de un mono sedente, pintada en color negro. Se trata de un objeto de filiación totonaca, elaborado en la Costa del Golfo de México en el periodo Posclásico (900–1521 d.C.).

Es importante destacar que algunas de las piezas repatriadas podrían integrarse a la exposición México diverso. Territorios, culturas y civilizaciones, la cual inaugurarán la Secretaría de Cultura federal y el INAH en septiembre próximo, en el marco también de las referidas conmemoraciones emblemáticas de 2021.

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