“El Jaque Mate” potencia la razón: maestro ajedrecista

*Forma carácter, mejora aprendizaje y fomenta la disciplina.

*“He visto en muchas ocasiones con tristeza que los niños prueban una y otra actividad y no se desarrollan en ninguna. A veces hay que tener cierto grado de disciplina y el ajedrez demanda mucha para quienes quieran practicarlo a un nivel competitivo”.

Martha Aguila

El ser una persona reflexiva, saber que a una acción hay una reacción, fueron algunos de los tantos regalos que el ajedrez le dio en su vida al maestro Carlos Guillermo Torres Ahu, quien durante más de 12 años ha mostrado su pasión por esta disciplina, a través de la enseñanza a niños, niñas y jóvenes, de quien se dice sorprendido cuando comienzan a tener un sentido crítico y se cuestionan el ¿Por qué?, de cada movimiento.

Después de trabajar en escuelas particulares, dedica sus tardes para que los pequeños aprendan a jugar ajedrez, pero no lo hace de manera tradicional, sino que busca que los alumnos se vuelvan autodidactas y disfruten su aprendizaje, así que uno puede escuchar las risas en el salón durante este proceso lúdico.

“El ajedrez es una pasión de un servidor y de los niños que cuentan con el apoyo invaluable de sus padres, que comparten este sueño y visión”, destacó, es por ello, que a iniciativa propia creó el taller “Círculo Mágico” y que no cuenta con ningún tipo de apoyo, pues su filosofía es que el burocratismo en lugar de ayudar entorpece el desarrollo de este tipo de actividades.

En un pequeño salón de clases que se ubica a un costado del centro comercial Soriana, en Volcanes número seis, los días martes y jueves acuden chiquitines de cuatro años hasta jóvenes quienes desarrollan el pensamiento analítico por medio del movimiento de piezas, que para ser más motivantes son de colores llamativos. Mientras que los lunes y miércoles el tiempo se dedica a niños que próximamente competirán.

Por varios años, el ajedrecista ha enseñado a generaciones completas en primarias, secundarias y bachilleratos, tan es así, que ahora son los jóvenes que han tomado la batuta y preparan un proyecto para enseñar ajedrez a personas adultas mayores y combatir el Alzheimer en municipios del estado de Tlaxcala.

Las mamás-principalmente, se sorprenden del cambio que genera esta disciplina en sus hijos, les forja el carácter, mejoran su rendimiento escolar y también asumen actitudes de responsabilidad, y quienes son muy inquietos se vuelven más analíticos.

“Lo que me ha sorprendido es cómo los  niños empiezan a tener un sentido crítico, a veces, demasiado y no aceptan un comentario familiar nada más porque si, ya empiezan a cuestionarse el por qué o hacia donde los va a llevar cierta conducta. Ese proceso de madurez me agrada mucho y que la mayoría de mis alumnos son universitarios alejados de todos los problemas, muchos se vuelven lectores y todo una mente crítica”, expresa.

Para sorpresa de muchos, el maestro Carlos Torres comenzó como un jugador tardío, ya que no hubo quien le enseñara ajedrez y siempre le llamó la atención, y fue hasta a universidad que pudo concretar ese anhelo.

Fue cuando los hijos llegaron a su vida que se mostraron interesados para mover sus propias piezas, luego se le sumaron sus amigos, y con el paso del tiempo este pasatiempo se convirtió en todo un proyecto que ahora es una gran familia ajedrecista en Tlaxcala.