Gerardo Santillán
El destituido delegado de Santa Cruz Progresó, Jorge Meléndez Pluma, mantiene retenida una patrulla adscrita a la Dirección de Seguridad Pública de Tlaltelulco en su capricho por ser reconocido como autoridad.
Junto con familiares y un grupo minoritario de inconformes allegados a su equipo político, Meléndez Pluma encabeza el movimiento a una semana de boicotear el proceso de elección para designar a la nueva autoridad por el método de usos y costumbres, después de que habitantes lo desconocieron por faltar a su palabra a un proyecto.
Vecinos han señalado que Jorge Meléndez busca oponerse a la voluntad del pueblo y por ello crea disturbios que afectan directamente al municipio y sus pobladores al dejarse de prestar servicios de seguridad con la patrulla retenida.
Habitantes de Santa Cruz Progreso ha revelado que Jorge Meléndez Pluma incumplió con la rehabilitación de la capilla del barrio, cuyos trabajos ascendían a una cantidad estimada de 30 mil pesos, ademas de denunciar que únicamente pretende beneficiar a su familia con los apoyos que recibe del Ayuntamiento de Tlaltelulco, así como tener el interés de seguir cobrando en la nómina del municipio.
“El pueblo está harto de que Jorge Meléndez no acepte que ya no es delegado, el pueblo ya eligió”, expresaron algunos vecinos que recientemente eligieron a Armando Pedraza como su nueva autoridad y representante del barrio ante el Cabildo.
La patrulla P-010 sigue retenida por el grupo inconforme y aunque se ha entablado diálogo con los inconformes para destrabar el conflicto por la vía legal, Jorge Meléndez y familia se niegan al insistir en perpetuarse en el poder por tres años más.
