Los familiares reconocieron los cuerpos de los hoy occisos como originarios de los estados de Puebla y Veracruz, respectivamente.
Con este y otros indicios recabados por los detectives se descarta que el móvil del doble homicidio haya ocurrido en la entidad.
Redacción
De acuerdo a las primeras líneas de investigación trazadas por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) se determinó que los dos hombres que fueron hallados sin vida en el interior de un vehículo en el municipio de Cuapiaxtla, no fueron privados de la vida en la entidad, ya que únicamente fueron abandonados en la citada demarcación, a fin de desviar las indagatorias.
Lo anterior, fue el resultado de las pesquisas implementadas por los especialistas de la dependencia encargada de procurar justicia, a fin de esclarecer el hallazgo de dos cuerpos sin vida del sexo masculino en el interior de un vehículo abandonado en la carretera Los Reyes Zacatepec, entronque con la autopista Amozoc-Perote, a la altura del municipio de Cuapiaxtla.
Posteriormente, la trilogía investigadora conformada por el Agente del Ministerio Público, peritos, y oficiales de la Policía de Investigación, tuvieron conocimiento que ambos cuerpos perdieron la vida a consecuencia de asfixia mecánica secundaria por estrangulamiento en su modalidad tipo homicida, de acuerdo al estudio postmortem.
Aunado a estos resultados, familiares de los hoy occisos reconocieron los cuerpos de quienes en vida respondieron a los nombres de José Antonio Tapia Carranco, que al morir contaba con 45 años de edad, originario y vecino del estado de Puebla; así como José Luis Marrón Benítez, de 28 años; originario de Veracruz, y vecino de Puebla.
En sus declaraciones, los deudos narraron que José Antonio Tapia Carranco fungía como chofer de tiempo completo de José Luis Marrón Benítez; asimismo, agregaron que el día de los hechos se dirigieron hacia el estado de Veracruz.
Con este medio de prueba y otros indicios recabados por los especialistas de la PGJE, se determinó que el doble homicidio no ocurrió en territorio tlaxcalteca, ya que los probables responsables únicamente abandonaron los cadáveres en la entidad, a fin de desviar las investigaciones.
Por lo anterior, la Procuraduría de Tlaxcala colabora de manera estrecha con las dependencias homologas de los estados de donde fueron originarias las víctimas, con el propósito de dar continuidad a las pesquisas y con ello ubicar el paradero del o los autores intelectuales y materiales del delito.