Fue hasta las 10:00 de la noche del miércoles y tras largas horas de afectación a la movilidad, que se llegó a un acuerdo respecto a la presunta invasión territorial de Quilehtla
Zahr Zuleiman
Con una patrulla y una motocicleta particular quemadas, concluyó por la noche del miércoles el bloqueo que habitantes del municipio de Acuamanala impusieron por horas sobre la Vía Corta Santa Ana – Puebla, inconformes con la invasión territorial que con una obra hizo la vecina comuna de Quilehtla.
Fue después de intensas pláticas encabezadas por el Director de Gobernación de la Secretaría de Gobierno del Estado, Joaquín Flores Nohpal, con los inconformes, que alrededor de las 22:00 horas de ayer se acordó levantar el cerco que afectó a miles de automovilistas y usuarios del transporte público a lo largo del día.
La obra de la discordia se encuentra en los límites de Acuamanala y Quilehtla a la altura de las vías del tren, donde la molestia de los habitantes del primer municipio es que maquinaria labora en terrenos que no le corresponden y no ha habido solución por parte de las autoridades correspondientes.
La protesta que inició a las 9:30 de la mañana del miércoles en la Presidencia Municipal de Acuamanala por varias decenas de pobladores, se trasladó a la Vía Corta por falta de respuesta y bloquearon ambos sentidos de la carretera, lo que propició un severo caos de movilidad.
El principal foco de conflicto se generó en un retorno a la altura de una tienda de conveniencia a pie de carretera, donde avanzada la tarde noche por alguna razón los inconformes prendieron fuego a una patrulla de la policía municipal y a una motocicleta particular.
Fue hasta después de eso que se llegó a un acuerdo firmado de liberar la vía de comunicación, con la promesa de atender la presunta invasión territorial; sin embargo, el daño ya estaba hecho y muy probablemente las autoridades estatales o federales no tomarán acciones legales contra los responsables del bloqueo de 12 horas o del daño al patrimonio.
