Gerardo Santillán

Es inconcebible que luego de dos eventos mortíferos en menos de un mes, ni las autoridades municipales ni estatales hayan procedido a la clausura permanente del antro denominado Classico, ubicado en Plaza Diamante de la ciudad de Chiautempan, el cual sigue operando abierta e impunemente.

Ese es solo uno de los comentarios en los que coinciden internautas que se han enterado de dos delitos de alto impacto acontecidos en plena fiesta en dos fines de semana. La madrugada del pasado 21 de mayo un mesero fue herido de bala luego de participar en una riña; y la madrugada de este 19 de junio, otro hombre murió de un tiro a la altura del cuello, también después de protagonizar una pelea.

En ambos casos los comunes denominadores han sido las peleas dentro del establecimiento, personas civiles y guardias del antro portando armas de fuego sin aparente licencia para utilizarlas, así como ausencia de autoridad ya no para detener a o los presuntos responsables, sino al menos para clausurar el negocio.

Aunado al hecho de que hay versiones incluso de la posible circulación de estupefacientes, Classico se ha convertido en un peligro para los cientos de jóvenes que cada fin de semana acuden para tratar de divertirse sanamente, lo cual ya no es posible en ese lugar que es uno de los preferidos por los “antreros”.

Los hechos de esta madrugada…

De acuerdo con la información disponible, alrededor de las 2:00 horas el servicio de emergencias 911 recibió una llamada sobre una persona herida cerca del acceso al establecimiento, pero al llegar cuerpos de seguridad y socorro, confirmaron que el sujeto de aproximadamente 35 años ya no tenía signos vitales y estaba en medio de un charco de sangre con una herida de bala a la altura del cuello.

Los asistentes fueron desalojados y muchos ni siquiera sabían del motivo, pues pensaban que la luz se había ido y ni siquiera observaron el cuerpo tirado en el piso; todo indica que una riña fue lo que provocó que alguien sacara el arma de fuego y la accionara contra la víctima.

Más tarde, elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) arribaron para levantar los primeros indicios y luego llevar el cadáver al Servicio Médico Forense para la necropsia de rigor. No se reportaron personas detenidas.