Redacción
La reforma al Marco Curricular y Plan de Estudios 2022 de la Educación Básica Mexicana que presentó recientemente la Secretaría de Educación Pública (SEP) tienen como objetivo adoctrinar a los menores en favor del gobierno de la Cuarta Transformación y no para mejorar la educación, advirtió la Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (FNERRR).
Hace días, la SEP presentó una restructuración curricular, sustituyendo los grados académicos por “fases de aprendizaje” y “campos formativos”, es decir, propuso la eliminación de los grados escolares, esto como parte del Marco Curricular y Plan de Estudios 2022 de la Educación Básica Mexicana.
Al respecto, Adán Márquez Vicente, secretario de organización de la FNERRR, afirmó que el documento critica la educación “neoliberal” de los gobiernos anteriores, entretanto, la nueva forma de aprendizaje encaminará “a la participación en los estados de bienestar para todos y todas”.
“Sin lugar a dudas se nota el discurso imperativo que ha manejado el presidente como bandera, haciendo uso político de la educación en México para denostar todo lo que gobiernos anteriores hicieron, posicionando la mal llamada Nueva Escuela Mexicana, título al que atribuyen su reforma educativa; pero no explican en qué estadísticas se han basado para condenar el modelo educativo que ha atendido a muchas generaciones anteriores y mucho menos como llevaran a cabo el nuevo esquema de aprendizaje”, sentenció Márquez Vicente.
Al tiempo que la dependencia plantea la eliminación de exámenes de evaluación internacional como PISA (Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes), no señala ni explica cómo se evaluarán a los alumnos, ni especifica cómo llevarán a cabo este nuevo plan de estudios, y en su defecto tampoco define cómo se enfrentará la emergencia educativa derivada de la pandemia, de la que aún no hay datos por la dependencia educativa.
Un aproximado del Banco Mundial estima que durante la pandemia los mexicanos perdieron aprendizajes equivalentes a dos años de escolaridad. Según su informe, antes de la pandemia los mexicanos alcanzaban en promedio aprendizajes correspondientes a 3° de secundaria, hoy su conocimiento llegará solo al equivalente a 1° de secundaria.
Y es que no sería la primera vez que el gobierno federal y la SEP intentan adoctrinar mediante la educación pública. A inicios de este año la dependencia publicó dos libros cuyo contenido dedica capítulos a enaltecer el proyecto político de López Obrador; mientras que Marx Arriaga, durante la primera Asamblea de Análisis del Plan y Programas de Estudio para el diseño de los libros de texto gratuitos, indicó que la intención era quitar palabras “neoliberales” para abrir paso a la Nueva Escuela Mexicana. Esta última plantea que, en cuanto a los alumnos, el Acuerdo Educativo Nacional les otorga el “interés prioritario de la educación impartida por el Estado”.
Finalmente, la agrupación estudiantil sentenció que el plan educativo de la SEP no cuente con una estrategia, ni base de datos actualizada que sea brújula del nuevo marco curricular; los jóvenes aseguran que no plantea acciones para contrarrestar la desgracia educativa.
“Denunciamos el carácter dictador de Obrador, pues al querer enaltecer su figura y asegurar mediante la educación de menores su estancia en el poder, se está permitiendo una reforma a la educación alejada completamente de un esfuerzo por crear un pensamiento crítico y científico desde la educación básica, al tiempo que no se ataca el creciente rezago educativo y la deserción escolar”, concluyó Márquez Vicente.