“Devolver el dinero a Chiautempan es criterio de Toño”: Héctor Domínguez
El edil recordó que todavía no fenecen las fechas para presentarse las posibles anomalías que podrían derivarse en un proceso administrativo
Zahr Zuleiman
Luego de que el ex alcalde Antonio Mendoza Romero retara que por cada peso que no se comprobara, él pondría tres pesos más; Héctor Domínguez aseguró que serán las autoridades correspondientes quienes determinen lo conducente a un posible desfalco a las arcas municipales, una vez que se concluya la caducidad para presentar las denuncias ante el Órgano de Fiscalización Superior (OFS).
En entrevista para Ojo Águila dijo que todos dan su punto de vista de acuerdo a lo vivido pero las anotaciones se establecieron en las actas correspondientes, así que como autoridades harán lo conducente para que sea el órgano fiscalizador el que proceda conforme a derecho.
“Es el criterio es de él, no mío”, expresó luego de que su antecesor hiciera su primera aparición pública, después de dejar el cargo como alcalde de la ciudad sarapera, y en la que culpara a su tesorero y a directores de área de haber provocado el presunto desfalco a uno de los ayuntamientos más importantes del Estado.
Ayer domingo, Antonio Mendoza aseguró que cuando asumió la responsabilidad como edil no estuvo de “chillón” y también enfrentó adeudos y encontró problemas, pero buscó soluciones; así que la nueva autoridad municipal debe hallarlas y dejar de quejarse de la situación, toda vez que su gente no cuenta con los niveles de educación preparatoria para estar en la presidencia municipal.
Lo anterior, después de manifestar su inconformidad debido a que durante el proceso de entrega- recepción su gente estuvo casi todo el festejo de Año Nuevo haciendo la entrega, mientras que el equipo de “H” no podía realizar las actas recibidas hasta las 5:00 horas de la madrugada.
Al respecto, el nuevo edil afirmó que los comentarios vertidos por su antecesor se deben a su criterio propio, sin embargo, recordó que todavía no fenecen las fechas para presentarse las posibles anomalías que podrían derivarse en un proceso administrativo.