La destrucción del PRI por Alejandro Moreno Cárdenas

Por: Eduardo Silvestre Hernández Moreno

Alejandro Moreno Cárdenas sigue bajo la presión del ojo publico, por su nulo, mediocre y corrupto desempeño en la dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Tras dos años de seudo liderazgo en el que se han perdido 11 de los estados que gobernaba el partido tricolor, diversos miembros y figuras del PRI han pedido su renuncia inmediata.

Sin mencionar sus audioescándalos , su riqueza inexplicable que en nada representa a la base trabajadora de los que dice representar, nadie con un salario honorable y de buenas prácticas puede comprarse una casa con un valor de 44 millones de pesos y decir que es producto de un trabajo honrado, pero bueno.

‘Alito’ es quien está desintegrando el partido, por lo que en tono sarcástico aseguró que este debía continuar en la dirigencia, para destruir al partido y a los tecnócratas de cuello blanco que su única virtud es tener apellidos de farándula y pertenecer a cunas de oro, es momento que el auto llamado libertador de la democracia limpie al partido de gente pedante y corrupta como lo es el mismo dirigente.

No entiendo como existen sectores, que viendo tanta evidencia aún lo proteja, aún lo defienda, que también son cínicos, que tanta es su hambre y ambición de poder que siguen al líder que el único camino que está realizando es llevarlos al precipicio. Pero por escasez de materia gris, creo que esa será su recompensa.

También no quiero culpar de todo al paladín de la Democracia como se hace auto llamar Alejandro Moreno Cárdenas.

El fondo de la tragedia del PRI radica en su cambio ideológico y a sus múltiples divergencias y pleitos internos que lo han aquejado por décadas.

La trasmutación de su nacionalismo revolucionario en el neoliberalismo los hundió, sin remedio alguno, en una prolongada decadencia.

La notable incapacidad de sus dirigentes actuales, trastoca a muchos otros militantes que pudieran ser un valioso activo. Aunque, también hay quienes no pueden presentarse sin sonrojo en la arena pública.

Todos ellos fueron actores principales en su adaptación al mando tecnocrático que duró más de tres décadas.

Ese modelo concentrador, adoptado sin requiebros, los sacó de la confianza ciudadana de la que gozaron por mucho tiempo. Pero todo llega a su final y, si fuerzan, de nueva cuenta, una alianza sin validez, seguirán en la ruta de su decadente espiral.

Al final, una limpieza profunda es la única clave para rescatar al PRI.

El PRI inventó las cañerías políticas de México. Muchos distinguidos operadores y líderes del partido son expertos en navegar en sus aguas negras.

Una información valiosa, para quien sabe verlas.

El PRI, pues, tiene cartas para negociar. Eso ayuda para evitar su extinción, especialmente si el resto de la oposición se empeña en mantener el odio y la violencia política como única estrategia electoral.

Al final y en tono reflexivo.

¿Qué tan dispuesta está la 4T para comprar las fichas tricolores? O mejor dicho que aceptarán para la salvación de Alejandro Moreno Cárdenas.