Elisa Márquez/Columnista
Se acercan días en los que las coaliciones y demás partidos preparan ya su artillería pesada, sacar los “trapos sucios”, para lanzar la primera bomba mediática la cual tendrá sin duda repercusión en el electorado con la finalidad de ganar terreno.
Desde hace tiempo, la ciudadanía desarrolla cada vez más una afinidad con una mujer que reúne los requisitos para gobernar el Estado de Tlaxcala. Hace 15 años se antojaba difícil pensar que una fémina pudiera dirigir y administrar a la “cuna de la nación”, hoy, es casi una realidad, falta menos para que la gente sufrague.
La gente está cansada de lo mismo, sabe que la entidad necesita un cambio y en Lorena Cuéllar han encontrado la experiencia y madurez política para otorgarle su voto de confianza. La critican y dicen que saltó de partido en partido, y me pregunto: ¿Tú permanecerías en un lugar donde no te valoran, donde el juego diario es la traición y mentira y no dejan avanzar por anteponer intereses particulares?
Sus detractores afirman que “no tiene idea” de lo que es el feminismo, ¿por qué? Sólo por afirmar que las mujeres nos “partimos en pedacitos” para ser madres, esposas y también profesionistas…pero es la verdad y aunque mucho se ha avanzado en la igualdad de género, las mismas que la critican lo siguen haciendo, se dan tiempo para ser todo eso y más…hasta para ir a una marcha y expresarse.
Se aproximan tiempos de guerra electoral, donde no se tocarán el corazón para hacer dudar a la población de que Lorena es una buena opción ante una desgastada Anabell Ávalos quien trata de reivindicarse junto con su partido, el padre de la corrupción en nuestro país: PRI.
Lorena Cuéllar sabe que la política siempre será un juego de negociación, nunca será ganar-ganar, porque estaríamos ante una dinámica diferente muy lejos que la de aspirar a gobernar, quienes están compitiendo por una diputación o presidencia municipal abanderados por MORENA lo saben.
Estamos ante un ser humano, con defectos y virtudes, sin embargo, en esta dinámica la parte contraria encumbrará lo primero, porque así es este juego, aunque en esta ocasión, la ciudadanía “ya no se chupa el dedo”, porque el PRI siempre dio malos resultados.
