Anabell Ávalos muestra ignorancia de la historia y cultura tlaxcalteca

Por: Fernando Martínez

Circula un video en las redes sociales donde la candidata del PRIAN, Anabell Avalos Zempoalteca, en una mediocre respuesta de “diferencias” entre las 2 coaliciones, según ella “hay muchísimas que yo le puedo decir, yo soy Anabel de Tlaxcala, Ávalos de Xicohtzinco y Zempoalteca de Totolac, YO NO TUVE ABUELOS GOBERNADORES”, es su fatídica respuesta de ‘diferenciación’ de Anabell, ¡como si ser nieta de algún exgobernador fuera un pecado!

A la ex alcaldesa de Tlaxcala Capital Anabell, le hace falta una clase gratuita de historia política tlaxcalteca y yo se la voy a dar. Los dos abuelos de Lorena Cuéllar, a que hace referencia Anabell Ávalos fueron: Joaquín Cisneros Molina y Crisanto Cuéllar Abaroa ambos docentes, hombres importantes de la cultura y la historia en Tlaxcala al grado de ser Presidentes de la Sociedad de Geografía, Historia, Estadística y Literatura del Estado (SGHEL) y también gobernadores.

De hecho, tres de sus familiares fueron Presidentes de la SGHEL, la más emblemática sociedad cultural de la Entidad, incluso uno de ellos, su abuelo Crisanto Cuéllar, fue el fundador.

Tanto el profesor y licenciado Joaquín Cisneros Molina, así como el historiador, poeta, literato, Crisanto Cuéllar Abaroa fueron dos prominentes políticos del Ala más progresista del Ente político emanado de la Revolución que tanto presumen los priistas. Don Crisanto Cuéllar fue revolucionario alcanzando el grado de Capitán.

Joaquín Cisneros Molina, más allá de ser Gobernador, también fue un hombre de cultura. Se graduó como profesor por la Escuela Nacional de Maestros, en 1928 y abogado por la UNAM, en 1936.  En 1935 fue director de la biblioteca de la Secretaría de Hacienda. En 1945 es designado director de la Escuela Preparatoria de Tlaxcala. Durante el sexenio de Joaquín Cisneros Molina (1957-1963) se imprimen postales de los edificios coloniales y de las ruinas arqueológicas, con el propósito de ser distribuidos dentro y fuera del país, se solicitó al Presidente de la República la construcción de la Casa de la Cultura en Tlaxcala. Fue el promotor de la Ley de Pensiones Civiles, institución que protege a los jubilados. Se creó el sindicato burócrata, y fue bajo su mandato que la Ciudad de Tlaxcala comenzó a cambiar su fisonomía, al adecuarse a los requerimientos de la urbanización, dejando a tras ese rasgo de villa provinciana, se crea el consejo ejecutivo de promoción y fomento agrícola, ganadero e industrial del estado de Tlaxcala, el 7 de enero de 1959.  En su gobierno, se destinaron grandes inversiones para la energía eléctrica, se inauguró una serie de calles y ramificaciones eléctricas.

Con Joaquín Cisneros Molina como gobernador, el maestro Desiderio Hernández Xochitiotzin, gran muralista tlaxcalteca decidió iniciar su trabajo pictórico en el Palacio de Gobierno: un gran proyecto cultural que es visitando por miles de personas que arriban a Tlaxcala, tanto visitantes nacionales como extranjeros.

Por su gran prestigio, Joaquín Cisneros Molina estuvo integrado en la terna para ser el primer rector de la Universidad Autónoma de Tlaxcala, esto en el periodo de Anselmo Cervantes. Fue Delegado de la SEP en Tlaxcala de 1978 a 1981. La Comisión Permanente del Congreso de la Unión, otorgó permiso a Joaquín Cisneros Molina para recibir reconocimientos como la ‘Orden del Quetzal’, ‘Orden de José Matías Delgado’, ‘Orden de Francisco Morazán’ y ‘Orden de Rubén Darío’, que le fueron conferidas por los Gobiernos de las Repúblicas de Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua, respectivamente.

Su otro abuelo paterno, don Crisanto Cuéllar Abaroa, como lo mencionó el historiador Armando Díaz de la Mora, “fue el hombre que institucionalizó la cultura en Tlaxcala… con don Crisanto Cuéllar encontramos a un hombre de cultura, un hombre de letras, más de 500 sonetos escritos y cerca de 700 poesías que publicó, más de 50 libros que él publicó de poesía, de historia de Tlaxcala y miembro de asociaciones culturales. Durante su gestión, de apenas 4 meses al frente del ejecutivo local, don Crisanto institucionaliza la cultura en Tlaxcala, durante su gestión se crea la ‘Casa de Cultura’ del Estado de Tlaxcala que 13 años después se va a convertir en el Instituto Tlaxcalteca de la Cultura (ITC), antes de esto solamente estaba la Sociedad de geografía e historia (hoy SGHEL) y el ‘Ateneo Miguel N’Lira de Apizaco como instituciones culturales”.

Y en efecto, Don Crisanto fue Precursor del Instituto Tlaxcalteca de la Cultura y fundador de la Hemeroteca del Estado. No se puede entender la historia de los municipios sin la sabiduría tanto de don Crisanto como de su hijo René Cuéllar Bernal, afamado diplomático Tlaxcalteca, pues ambos son parte de la bibliografía de los municipios.

La esposa de don Crisanto, Guadalupe Bernal, fue una mujer relevante en la docencia de Tlaxcala, pues fue la primera supervisora de educación preescolar en la historia del Estado.

Con estos y otros antecedentes, podemos decir que Lorena Cuéllar Cisneros, es una Tlaxcalteca Genuina, que desciende de hombres que han sido pilares relevantes de la cultura y la historia de Tlaxcala.

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