La Fiscalía de México detiene en Acapulco al exgobernador Mario Marín, implicado en el caso de tortura a la periodista Lydia Cacho

Redacción/RT News

La Fiscalía General de la República (FGR) detuvo este miércoles en el balneario de Acapulco (Guerrero) al exgobernador de Puebla, Mario Marín, uno de los principales implicados en el caso de tortura a la periodista Lydia Cacho.

El actual gobernador de Puebla, Mario Barbosa, informó en su cuenta de Twitter sobre la detención realizada por los elementos de la FGR contra el exmandatario que gobernó la entidad entre 2005 y 2011.

Posteriormente, Cacho informó que había sido notificada por la ⁦FGR⁩ al momento de la detención de Marín en Acapulco.

“Llevo 14 años buscando justicia por haber sido torturada por este cómplice de redes de #PornografíaInfantil. Vamos por todos”, escribió la periodista en su cuenta de Twitter, junto con una fotografía de elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) al momento de arrestar a Marín y subirlo a una camioneta blanca.

La detención fue ejecutada tras las órdenes de aprehensión emitidas el 3 de diciembre de 2020 por la magistrada del Primer Tribunal Unitario, María Elena Suárez, en contra de Marín, del empresario Kamel Nacif y del exdirector de la Policía Judicial de Puebla, Adolfo Karam.

A Marín, Nacif y a Karam se les considera los autores intelectuales de la detención y las violaciones a los derechos humanos sufridas por Cacho, entre el 16 y 17 de diciembre de 2005.

El caso de Lydia Cacho

La periodista y defensora de derechos humanos publicó el libro ‘Los demonios del Edén’, en el que documentó una red de pornografía infantil y trata de menores encabezada por el empresario Jean Succar Kuri —actualmente en prisión— y de la que formaba parte Nacif, con la complicidad de diversas autoridades y políticos.

Tras la publicación de esta obra, la periodista fue detenida arbitrariamente por policías en Quintana Roo, quienes presuntamente atendían una demanda interpuesta por Nacif por difamación, ya que Cacho documentó que el empresario era parte de esta red de explotación sexual de menores.

La periodista estuvo incomunicada y fue torturada durante su arresto y traslado de Quintana Roo a Puebla, ocurrido entre el 16 y 17 de diciembre de 2005. En esta operación ilegal, Cacho fue víctima de “insultos, violencia sexual y amenazas de muerte constantes“, según narró.

Un día después de la detención arbitraria, la defensora obtuvo su libertad bajo fianza. Para el 14 de febrero de 2006, se difundió en medios la grabación de una llamada telefónica entre el exgobernador Marín y Nacif, en la cual el empresario le agradecía al político poblano por detener y procesar a Cacho.

Marín estaba prófugo de la justicia mexicana y, desde abril de 2019, era buscado en 190 países, después de que la Oficina de Policía Internacional (Interpol) giró una ficha roja para lograr la captura del exgobernador.

Se espera que en las próximas horas Marín sea trasladado a Cancún, Quintana Roo, en donde se ubica el Primer Tribunal Unitario que dictó la orden de aprehensión en su contra.