El contexto electoral frente a la pandemia Covid 19

Por: Edwin Paredes García

En medio de la pandemia y de una profunda crisis económica y social que se está presentado en México, los partidos políticos al igual que las situaciones de los comercios se enfrentan en la recta final de 2020 con un intenso calendario político-electoral, antesala de un 2021 lleno de elecciones e incertidumbre.

México llega al último tercio de 2020 (septiembre-diciembre) siendo el epicentro de la pandemia y con un cargo panorámico electoral, en que la polarización, la incertidumbre económica, el deterioro social y la ausencia de agendas consensuadas marcan un intenso final del año. La región está inmersa en su peor crisis económico-social en medio siglo. Se entra, así en una “nueva normalidad” político y electoral la podríamos llamar de esta manera debido a que la región se enfrenta a fines de confinamientos, leves indicios de recuperación económica y elecciones con nuevas normas que terminaran poniendo a prueba las instituciones democráticas, los partidos políticos y los viejos y nuevos liderazgos.

La pandemia y su propagación temporal han trasformado no solo la vida de los ciudadanos, la economía y lo comercial, sino también los usos y costumbres de la política. Tanto los gobiernos como los nuevos opositores han debido acomodarse a una nueva realidad cambiante y muy incierta acerca de las consecuencias de las acciones individuales y colectivas. Cabe resaltar que en algunos casos el virus fusionó como una estrategia política o como excusa para que ciertos partidos pongan en marcha políticas clientelares, para lograr sus objetivos por una vía más rápida.

Es así, que los partidos han debido dejar buena parte de su espacio a líderes establecidos sin tener tiempo para su renovación, por lo tanto, la situación ha favorecido las consolidaciones de “hombres fuertes” posicionados y simplemente elegidos para no perder el registro electoral.

En cuanto 2021 debemos elegir o renovar a nuestros representantes políticos, en algunos casos las elecciones coincidirán, pero debemos afrontar un intenso y fuerte calendario electoral. Lo más preocupante para la ciudadanía es saber ¿Tendremos contacto frente a las urnas? y en todo momento tenemos la certeza de saber ¿cómo será votar con el riesgo de introducir en las urnas un sobre que no solo contenga el voto, sino también la posibilidad de trasmitir el coronavirus? ¿Cómo se seleccionarán los candidatos y quien lo hará? ¿Habrá elecciones primarias allí donde es preceptivo o las decisiones dependerá del criterio del líder del partido?

En lo que queda de 2020 habrá numerosas elecciones que son preocupantes para la ciudadanía, debido a que se encuentran con la certeza de saber cómo funcionará este contexto político sin tener enfrentarse a las urnas y poder contagiarse de coronavirus, o simple será una estrategia política en lo que solo se establecerá un espacio simbólico para cumplir los objetivos políticos, esperamos con ansias poder enfrentar no solo una pandemia sino un contexto político en buenas estancias.

La pandemia representa un reto político, además de lo económico y lo social para los sistemas democráticos de México. Si se quiere mantener la democracia y sus instituciones en funcionamiento será necesario garantizar el conjunto de libertades y derechos que permiten celebrar los comicios en condiciones de equidad para toda la ciudadanía.